You are a loving and compassionate Father, and I thank You for Your discipline and correction in my life. Help me to receive Your rebuke with humility and to learn from it, so that I may grow in wisdom and understanding. May I not despise Your discipline, but instead embrace it as a way to become more like You.
Lord, I pray that You would give me a heart that is open to Your correction and guidance. Help me to trust in Your love and know that Your discipline is for my good. As I walk in obedience to Your word, may I experience the peace and joy that comes from following Your ways. Thank You for Your faithfulness and for always being there to guide and teach me.
Tu palabra en este versículo nos enseña que no debemos menospreciar tu disciplina ni desmayar cuando eres reprendido por ti. Reconozco que muchas veces me cuesta aceptar tus correcciones y me resisto a tu disciplina. Perdóname por ponerme obstinado y cerrar mi corazón a tu enseñanza. Te pido que me des la humildad y la sabiduría para reconocer cuando estoy equivocado y la fortaleza para aceptar tu corrección con gratitud, sabiendo que es para mi bien.
Te pido que me ayudes a entender que tu amor y tu disciplina van de la mano, y que tu corrección es una muestra de tu amor por mí. Ayúdame a recibir tus enseñanzas con un corazón amoroso y obediente, sabiendo que todo lo que haces es por mi bien. Te entrego mi corazón y mi voluntad para que tu disciplina pueda moldearme y transformarme a la imagen de tu Hijo. En el nombre de Jesús, Amén.
No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, ni te fatigues de su corrección.